Mi espalda contra el suelo, comienzo a elevarme, lejos, entrecierro los ojos y siento como el viento pasa por mis dedos, los dedos que tocaron lo prohibido.
Me siento bien, me siento bien, me siento casi bien.
La agonía del corazón ha desaparecido, tu ya no estas, no estas lejos, no estas aquí, no estas conmigo, no estas con nadie, no estas presente, no estas ausente,no estas, no estas mas.
El camino comenzó a ser amplio lleno de hojas caídas.
-Me gusta pisar las hojas y sentir como suena eso en mi cabeza-.
-No siento nada, contigo no siento nada solo unos deseos de besarte, amarte y gritarte mil veces mil lo que el corazón me dice-.
Pasan millones de hojas caídas por entre mis manos mientras me elevo,siento el viento, que sopla que me lleva que fluye que cae y sube que viaja fugaz y decido, como el cariño que poseo para ti.
Mira hacia las calles, millones de autos sin un copiloto, millones de personas abstraídas en si mismas pensando en esa luz roja.
Comienzo a caer a gran velocidad , me siento bien , me siento muy bien.
